lunes, 20 de agosto de 2012
Con las mismas diferencias, somos todos iguales.
Somos todos diferentes, pero, por ser todos diferentes, somos todos iguales.
Lo que nos diferencia de los demás son los pequeños rasgos que les damos a todo aquello que nos rodea. Ya sean sentimientos, personas o cosas. Todo se hace diferente dependiendo de la persona, todo tiene un rasgo único, y lo hace irrepetible a tal ser.
Desde la vida que llevamos cotidianamente, los pasos que damos, las palabras que utilizamos, son rasgos que nos hacen diferentes, pero muchas veces, iguales.
Los humanos, quizás, somos como los códigos de barras. Únicos, irrepetibles, y todos, tenemos un por qué y para qué servimos y estamos hoy acá. Solo está en darse cuenta y disfrutar a pleno del interrogante que se nos presenta.
Descubre ese por qué y para qué, porque la vida es bella y... ¿para qué vivirla si no lo vas a hacer con una sonrisa?
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Muy bello!
ResponderEliminar¡Gracias!
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